LOKI, EL SEÑOR DE LAS TRAVESURAS.
Falso y voluble, listo y taimado, al tramposo dios Loki se le conocía como el "Padre de las mentiras". Hay diferentes versiones sobre los orígenes de este Dios y la más fiable le convierte en el hijo de un gigante. Ganó la entrada a Asgard sólo por conseguir la amistad de Odín y se convirtieron en hermanos de sangre.
Algunos de los mitos contados sobre Loki siguen el mismo esquema: un individuo demasiado listo se lleva un merecido castigo. En uno de ellos, al perder una apuesta que le podía haber costado la cabeza, acaba con los labios cosidos, apropiado destino para un charlatán.
Sin embargo, en otras ocasiones su rápido ingenio salvó a los Aesir del desastre. Cuando un gigante exigía el sol, la luna y a Freyja como pago por construir un muro alrededor de Asgard, fue Loki el que evitó que cumpliera su tarea a tiempo y pudiera reclamar su recompensa.
Como puede verse, Loki era una figura muy compleja, convirtiéndose en la figura del mal en la batalla del final del mundo: Ragnarök. Se cree que este Dios era la personificación del fuego de los bosques, uno de los mayores agentes de destrucción que conocieron los antiguos pueblos.
De la unión de Loki con una ogresca nacieron tres espantosos retoños: el lobo Fenrir, la serpiente Jormungandr y Hel, la reina del inframundo.
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