EL MITO DEL DILUVIO UNIVERSAL

PRÓXIMO ORIENTE 

El mito del diluvio universal en el Próximo Oriente es de origen mesopotámico. Se ha conservado una lista de reyes sumerios en la que se indica que el reinado de los primeros ocho monarcas, una era legendaria de 241,200 años, siguió "el diluvió que cubrió el país. Esos reyes, que recuerdan a los patriarcas bíblicos anteriores al diluvio, incluyen a Gilgamesh y a Dumuzi. Según los fragmentos conservados, cuando los dioses decidieron anegar a la humanidad, el dios del agua Enki salvó a Ziusudra, el piadoso rey de Sippar, temeroso de los dioses, quien construyó una embarcación a fin de escapar del diluvio de siete días. Más adelante, Ziusudra adquirió "vida como un dios". En la literatura acadia hay dos versiones de la historia del diluvio. El Poema de Gilgamesh hace de Utanapishtim el héroe, mientras que en otro mito el superviviente de la hambruna y del diluvio primordiales es Atrahasis. Durante la dominación asiria, en el siglo VII a.C., el mito de Atrahasis se utilizaba como encantamiento durante el parto. 

Según la tradición hebrea, la supervivencia del linaje de Adán depende de la rectitud de Noé, nieto de Matusalén.  Mientras que a los dioses mesopotámicos les aburría el servicio que les prestaban los humanos, aparte el estruendo que producían, Yavé envió el diluvio como consecuencia del pecado de Adán. La vida y la conducta de Noé constituían un manifiesto rechazo de las de sus contemporáneos, incitados a la maldad por los ángeles caídos. 

GRECIA 

En la mitología griega, el diluvio fue ordenado por Zeus, quien molesto con la humanidad, a quien consideraba una raza viciosa, decidió enviar al mundo un gran diluvio para acabar con ellos. Solo dos personas justas se salvaron: Deucalión y Pirra, quienes aconsejados por el titán Prometeo, construyeron un arca, y un gran cofre en donde se escondieron. Durante nueve días con sus noches estuvieron flotando en las aguas que el diluvio trajo. Al llegar a las montañas de Tesalia, Zeus les envió a Hermes con el encargo de ofrecerles un deseo. Deucalión deseó tener compañeros, entonces Zeus ordenó que lanzasen, por encima de sus hombros, los huesos de su madre. Al inicio se espantaron, pero Zeus se refería a las piedras (los huesos de Gea, la Tierra, madre de todos) así que comenzaron a arrojar las piedras, y así poblaron la Tierra. 

INDIA 

En los Vedas se refiere la historia de Manu, el que es considerado el primer ser humano, y el primer monarca que reinó sobre la tierra. Fue avisado por una encarnación del dios Visnú, de que un gran diluvio se aproximaba procedente de un océano ubicado en las lejanías del Universo. Construyó un arca y alojó en él a su familia y el semen de todas las especies existentes. 

INCAS 

Viracocha, el creador de la humanidad según los incas, ordenó a a los hombres que viviesen sin pelear y se dice que durante un tiempo los humanos crecieron como una sociedad desarrollada. Hasta que la ambición y el orgullo llevó a la humanidad a desobedecer las órdenes de su creador, lo cual enfureció a Viracocha. El Dios decidió enviar un gran diluvio para acabar con los humanos, pocos fueron los que sobrevivieron, y esos pocos forjaron el Imperio Inca. 

MEXICAS 

Cuentan las antiguas tradiciones que hace mucho tiempo, antes de que los españoles llegaran a esta tierra, ocurrió una serie de lluvias que no cesaban ni de día ni de noche; los hombres se preguntaron por qué les asolaba el agua, hasta que dieron cuenta del problema: la humanidad no se respetaba entre si y no le gustaba trabajar. Aquellos hombres construyeron una gran pirámide, tan alta que rozaba los cielos, su nombre era Tolan Cholatan. En la cima consagraron un altar a Tlaloc y a Quetzalcóatl. Los dioses observaron su unión y solidaridad e hicieron cesar su castigo.

MAPUCHES

Para elos mapuches, la causa del diluvio fue la lucha entre dos serpientes, Tren tren vilu (aliada del hombre) y Caicai vilu (enemiga del hombre). La segunda decidió inundar la tierra para acabar con los humanos, sin embargo, Tren tren vilu le ordenó a los hombres que se marchasen a lo alto de un cerro para que no los alcanzase el agua. Muy pocos se salvaron, y los que perecieron se convirtieron en los seres que hoy pueblan las aguas.

PERSIA

Yima, el primer hombre que pisó el planeta, sigue las órdenes del dios Ahura Mazda y se esconde en una cueva con sus mejores hombres, animales y plantas porque el Ahriman está dispuesto a destruir la Creación.