Buscar este blog

domingo, 30 de julio de 2017

CENTAUROS


El centauro es la criatura más armoniosa de la zoología fantástica. Biforme lo llaman las Metamorfosis de Ovidio, pero nada cuesta olvidar su índole heterogénea y pensar que en el mudo platónico de las formas hay un arquetipo del Centauro, como del caballo o del hombre. El descubrimiento de ese arquetipo requirió siglos; los monumentos primitivos y arcaicos exhiben un hombre desnudo, al que se adapta incomodamente la grupa de un caballo. En el frontón occidental del Templo de Zeus, en Olimpia, los centauros ya tienen patas equinas; de donde debiera arrancar el cuello den animal arranca el torso humano. 

Ixión, rey de Tesalia, y una nube a la que Zeus dio la forma de Hera, engendraron a los Centauros; otra leyenda refiere que son hijos de Apolo (se ha dicho que "centauro" es una derivación de gandharva; en la mitología védica, los Gandharva son divinidades menores que rigen los caballos del sol) Como los griegos de la época homérica desconocían la equitación, se conjetura que el primer nómada que vieron les pareció todo uno con su caballo y se alega que los soldados de Pizarro o de Hernán Cortés también fueron centauros para los indios. 

"Uno de aquellos de caballo cayó del caballo abajo; y como los indios vieron dividirse aquel animal en dos partes, teniendo por cierto que todo era una cosa, fue tanto el miedo que tuvieron que volvieron las espaldas dando voces a los suyos, diciendo que se había hecho dos haciendo admiración dello : lo cual no fue sin misterio; porque a no acaecer esto, se presume que mataran a todos los cristianos", reza uno de los textos que cita Prescott. 

Pero los griegos conocían al caballo, a diferencia de los indios; lo verosímil fue conjeturar que el Centauro fue una imagen deliberada y no una confusión ignorante. 

La mas popular de las fábulas en la que los Centauros figuran, es la de su combate con los lapitas, que los habían convidado a una boda. Para los huéspedes, el vino era cosa nueva; en mitad del festín, un Centauro borracho ultrajó a la novia e inició, volcando las mesas, la famosa Centauromaquia que Fidias, o un discípulo suyo, esculpiría en el Partenón, que Ovidio cantaría en el libro duodécimo de las Metamorfósis y que inspiraría a Rubens. Los centauros, vencidos por los lapitas, tuvieron que huir de Tesalia. Hércules, en otro combate, aniquiló a flechazos la estirpe. 

La rústica barbarie y la ira están simbolizadas en el Centauro, pero "el más justo de los Centauros, Quirón", fue maestro de Aquiles y de Esculapio, a quienes instruyó en las artes de la música, de la cinegética, de la guerra y hasta de la medicina y la cirugía....

El libro de los seres imaginarios. J.L. Borges.

0 comentarios:

Publicar un comentario